Algunos dicen que los jóvenes no mostramos interés por las cuestiones políticas, que carecemos de compromiso con los asuntos colectivos, pero eso no es verdad. Simplemente, rechazamos una determinada manera de hacer política que pone barreras a nuestra participación.

Estamos cansados de que se nos encasille en estereotipos que no se ajustan a nuestro pensamiento y a nuestra realidad. Ni nos pasamos las horas bebiendo, ni estamos pensando todo el rato en salir de fiesta. Cada uno de nosotros, lucha a diario para conseguir una mejor formación e intenta superarse para afrontar el futuro, dando lo mejor de sí.

Somos la generación mejor formada e informada de la historia y tenemos grandes convicciones y principios. Por eso, con la misma energía que nos rebelamos contra las  injusticias socialices, rechazamos las etiquetas que nos colocan por ser jóvenes. Basta ya de encasillamientos. Hoy, aquí, los jóvenes reivindicamos nuestro sitio en la sociedad, porque somos protagonistas activos del presente y queremos interpretar el papel principal que nos corresponde en la construcción de un futuro mejor para todos.

Creemos que la política no solo está en las instituciones. La política está en la manera que tiene cada uno de ver las cosas o de actuar ante determinadas situaciones. La política está en todos los lados, porque influye en cualquier situación cotidiana; en el billete del autobús, en la entrada del cine, en la caña que nos tomamos con nuestros amigos…

Debemos tenerlo presente siempre. Porque, si algún día los jóvenes pensamos que la política es sólo para los políticos, el sistema nos habrá ganado la batalla. Habrá conseguido lo que a algunos les gustaría: que nos limitemos a votar cada cuatro años a un partido político como el que ha encabezado durante décadas el Gobierno Vasco, y que el resto del tiempo no nos planteemos nada. Que nos dejemos dominar por la comodidad y el conformismo y renunciemos a ejercer nuestra capacidad crítica. Que nos rindamos, en definitiva, a eso que llaman la “gran fiesta de la Democracia”.

Y no estamos dispuestos a aceptarlo. No lo vamos a admitir aún a pesar de que nos hemos sentido muchas veces excluidos de la política de nuestro país. A pesar de que nuestras instituciones nos han dado la espalda, porque quienes nos han gobernado no nos han tenido en cuenta para nada.

Hemos tenido que escuchar que los jóvenes no nos movemos, que no luchamos contra las injusticias, que pasamos cuando se nos requiere para dar un vuelco a las cosas.

Pero, pese a quien pese, somos el futuro de Euskadi. Y precisamente por ser jóvenes, debemos demostrar a quienes nos juzgan o nos ignoran que tenemos tanta o más capacidad que ellos para producir cambios.

Muy pronto vamos a poder hacerlo. En Euskadi vivimos un momento histórico. Podemos lograr el cambio que abra un nuevo tiempo de esperanza tras tantos años de gobiernos que han alimentado la bronca y la división.     

Hoy, en este país, la ilusión se llama Patxi López. Para Euskadi y, en especial, para sus jóvenes. Patxi y el Partido Socialista de Euskadi-Euskadiko Ezkerra representan la alternativa.

Hoy más que nunca, estamos cansados de escuchar las mismas noticias sobre nuestro país; sufrimiento, consultas, autodeterminación, confrontación política, falta de entendimiento… Nos rebelamos contra el raca-raca permanente, porque no podemos soportarlo más.
 
Queremos luchar por la Euskadi Real, por un país en el que cabemos todos. Por una Euskadi con un Gobierno que se ocupe de los problemas de la gente. Con un Gobierno que apoye a los jóvenes y nos acompañe en las diferentes etapas de nuestro desarrollo. Somos ciudadanos de pleno derecho que ahora nos sentimos olvidados.

Por eso, hoy aquí queremos compartir con la sociedad vasca y, especialmente, con todos y cada unos de los jóvenes, los compromisos que el PSE-EE ha pactado con Juventudes Socialistas de Euskadi Ramón Rubial, tras escuchar las demandas e inquietudes de los jóvenes vascos.

  1. Puesta en marcha de un plan de integral para la emancipación de la juventud con dos ejes básicos: la orientación profesional y el acceso a la vivienda, para que los jóvenes vascos dejemos de ser los que más tarde nos emancipamos en Europa.
  2. Desarrollo de políticas para retener el talento en nuestro país, evitando que, cada año, muchos de nosotros tengamos que marcharnos para conseguir en otros lugares el puesto de trabajo para el que nos hemos estado formando durante tanto tiempo.
  3. Impulso de políticas que contribuyan a poner fin a la precariedad laboral que sufrimos la mayor parte de nosotros.
  4. Apoyo a nuestras iniciativas empresariales, acortando los trámites administrativos y plazos para la creación de un negocio, y apuesta por el “PROYECTO INICIATIVA JOVEN”, que fomente la capacidad de imaginación, creatividad e innovación de los jóvenes.
  5. Construcción de 40.000 Viviendas de Protección Pública (VPP) en los próximos cuatro años. Al menos el 40% de las VPP que se promocionen serán en régimen de alquiler. Se crearán alojamientos dotacionales, apartamentos de alquiler, para jóvenes de 20 a 25 años, con una renta mensual no superior al 40% del SMI.
  6. Establecimiento de un convenio con la obra social de las cajas de ahorros para la creación de un “HIPOTECA JOVEN” que reduzca los tipos de interés para los mejores de 35 años, por el 100% de la tasación.
  7. Pacto social y político a favor de las energías renovables y de su pleno desarrollo en un plazo de cinco años.
  8. Apuesta por un modelo educativo trilingüe (castellano, Euskera e inglés),sin discriminación entre lenguas. Una educación en valores democráticos, que combata los presupuestos ideológicos del totalitarismo en cualquiera de sus formas, y deslegitime  ética, social y políticamente el terrorismo. Una educación plural para la sociedad plural en la que vivimos, que trate el euskera no como si fuera sólo el patrimonio de unas siglas, sino como patrimonio de todos y cada uno de los ciudadanos vascos.
  9. Creación de un ABONO JOVEN DE LA CULTURA, que facilite nuestro acceso a precios asequibles a los eventos culturales, y puesta en marcha de la OFICINA DE JÓVENES CREADORES VASCOS, que impulsará la difusión de las obras y creaciones de nuestros jóvenes artistas.
  10. PACTO POR LA NOCHE, para garantizar los derechos de todos, buscando  acuerdos para superar las actuales limitaciones, incrementando las diferentes opciones de ocio y tiempo libre.
  11. Optimización de la empleabilidad de los jóvenes inmigrantes que, en numerosas ocasiones, requieren una orientación personalizada y adaptada a la realidad, con el necesario asesoramiento y oferta formativa, tanto continuada como ocupacional. Lucha contra la contratación irregular de la población extranjera y tolerancia cero ante cualquier manifestación xenófoba o racista.
  12. Puesta en marcha de programas de prevención y campañas regulares de información contra el alcoholismo y la drogodependencia, y formación sanitaria desde los centros escolares.
  13. Instalación de máquinas expendedoras de preservativos masculinos y femeninos a un precio simbólico en los centros públicos y en lugares donde la presencia de jóvenes sea amplia.
  14. Campaña por la creación de nuevas zonas wimax para que los ciudadanos de la CAV podamos tener un acceso libre y gratuito a Internet. Todos los ciudadanos tendremos derecho a acceder a un servicio básico de al menos 1 mega.

Euskadi tiene que ser un país construido entre todos y para todos. También para  jóvenes. En estos catorce compromisos depositamos nuestra ilusión, y estamos seguros que podrán hacerse realidad a partir del 1 de marzo. Nuestra esperanza tiene nombre de cambio. Se llama Patxi López.