Las jóvenes socialistas estamos convencidas de que la Educación es un pilar básico de toda sociedad. A lo largo de toda la historia ha sido el arma principal para conseguir la emancipación, alcanzar los mayores niveles de libertad, transformar el mundo, resolver las desigualdades, y hacer más justas las sociedades.

Las jóvenes socialistas entendemos como premisa que la Educación debe ser Pública y laica. Entendemos que las clases de religión, sea cual sea ésta, no debe formar parte de la actividad escolar por ser extraña a ésta. Pero, en pro de la optimación de los recursos, entendemos que, como cualquier otra asociación podrán usar estos espacios públicos fuera del horario lectivo siempre que sea posible esta compatibilidad.

Pedimos que se vayan eliminando de manera progresiva los conciertos, y todos los privilegios y las diferencias que existen entre los centros concertados y los centros públicos, poniendo especial cuidado en los derechos las trabajadoras de la escuela concertada, que no deben ser perjudicadas por esta eliminación.

Deseamos que la sociedad perciba la calidad de la Educación Pública como un elemento de prestigio, y que se cumplan las cuotas de inserción de alumnas con necesidades especiales también en los centros concertados.

Apostamos también por la formación profesional como fórmula educativa alternativa al bachillerato, para las alumnas que no deseen cursar el mismo. Los ciclos formativos deben ser una de las vías claras a las que se pueden optar como primera formación de cara a un primer empleo. Una formación amplia, pero especifica.