El próximo dí­a 23 se conmemora el Dí­a Internacional contra la Trata y la Explotación y el Tráfico de Personas con fines de explotación sexual, por lo que los jóvenes socialistas hacen un llamamiento para terminar con “un delito que permanece oculto y que es el tercero más lucrativo del mundo” 

Juventudes Socialistas de Euskadi (JSE-Egaz Ramón Rubial) ha realizado hoy un llamamiento a los poderes píºblicos para un mayor esfuerzo en la erradicación de la trata y el tráfico de personas con fines de explotación sexual.

En opinión de la organización juvenil, “la explotación sexual supone una lacra pendiente para la cual la sociedad civil y los poderes píºblicos deben dar una respuesta contundente, ante la sistemática violación de los derechos más elementales, en especial de mujeres, nií±os y nií±as”.

Para los jóvenes socialistas, “ni la sociedad en general, ni los y las jóvenes en particular, podemos permanecer impasibles ante una de las más grandes, constantes y vergonzosas situaciones de violación de la dignidad personal que padece el planeta, que afecta a 12 millones de personas en el mundo. Son los poderes píºblicos – han aí±adido – quienes deben realizar una tarea más profunda precisamente para representar el sentir ciudadano contra esta forma de explotación”.

Desde la dirección de JSE-Egaz han destacado que “los y las jóvenes socialistas estamos dispuestos a reclamar a las Administraciones esa labor más profunda para erradicar estas prácticas: las declaraciones institucionales están muy bien, pero la acción educativa, la concienciación y la tolerancia cero deben conjugarse para terminar con un delito profundamente extendido, muy lucrativo, que se mueve en una atmósfera de ocultación y que goza de una permisividad incompatible con la protección más básica de los derechos humanos”.

Por íºltimo, han alertado de que “no podemos permitir que, bajo el amparo de la crisis económica, se reduzcan los esfuerzos para combatir esta vergí¼enza en nuestro propio paí­s, donde unas 50.000 personas se ven afectadas”. “No hay excusa económica que valga para reducir esfuerzos en la consecución de una vida digna para todos los seres humanos” concluyeron.Â